La calculadora fue inventada en 1642 por Blaise Pascal y ha sido una herramienta invaluable para ingenieros e inventores, acelerando los cálculos y la solución de problemas en una variedad de campos. Está compuesta de un teclado de plástico, una estructura de alambre conectada a las teclas y las pilas, y una cubierta de plástico o pasta, con silicio proporcionando memoria.