El documento describe tres tipos principales de contaminación: la contaminación de cuerpos de agua, que afecta a las criaturas acuáticas; la contaminación del suelo causada por exceso de fertilizantes y productos químicos; y la contaminación del aire por monóxido de carbono y óxido de azufre. Concluye que la contaminación representa un peligro ecológico inminente y contribuye al calentamiento global, por lo que se deben tomar medidas para evitarla.