Chantrea se encuentra al norte de Pamplona, limitado por el monte Ezkaba, el casco antiguo de Pamplona, Burlada y Ansoáin. Se construyó en 1950 debido al éxodo rural y gracias a la ayuda del Patronato de Francisco Franco, que proporcionó materiales y suelo a los vecinos. Fue el primer barrio en tener sus propios símbolos culturales como gigantes, cabezudos y dantzaris.