El documento discute los desafíos de usar el celular de manera apropiada en la clase. El autor nota que a veces es tentador usar el celular cuando uno se aburre en clase en lugar de prestar atención. Lamentablemente, el uso del celular se ha vuelto un vicio para algunos estudiantes. El documento también menciona que la obsesión por los celulares ha llevado a algunas personas incluso a robar para poder conseguir uno.