El Coronel José Arturo Castellanos, cónsul general de El Salvador en Budapest entre 1942 y 1945, salvó la vida de más de 40,000 judíos al otorgarles certificados de ciudadanía salvadoreña para evadir la deportación a campos de concentración nazis. Sus acciones heroicas le valieron ser reconocido como "Justo entre las Naciones" por el Museo del Holocausto en Israel y Estados Unidos, aunque en El Salvador no es ampliamente reconocido.

1. Coronel Castellanos“Justo entre las Naciones” El Salvador si tiene héroes. Es triste que El Salvador reconozca con parques y bustos a extranjeros con pasado turbio y que ni sabían donde quedaba nuestro país, mientras salvadoreños héroes a nivel mundial no son reconocidos. ?Has oído hablar de este salvadoreño? El Coronel José Arturo Castellanos es un héroe con más de 40,000 almas (se cree que fueron más) salvadas de manera totalmente altruista.

2. Museo del Holocausto honra a salvadoreño «José Arturo Castellanos, cónsul general de El Salvador, le dio a Mandel-Mantello el título de Primer Secretario en el consulado, así facilitando el rescate de miles de seres humanos de las manos de los Nazis. Por sus esfuerzos, Castellanos fue concedido el honor de "Justos entre las naciones" por el Museo YadVashem del Holocausto en Israel en mayo y el Holocaust Memorial Museum de Washington en Agosto de 2010.» Entrega del honor al Coronel Castellano a su hija.

3. A Castellanos y MandelMantello se les atribuye el otorgamiento, entre 1942 y 1945, de varios miles de certificados de nacionalidad salvadoreños a judíos, principalmente húngaros, para que lograran evadir los campos de exterminio nazis. Sin los certificados salvadoreños, Polak y su familia probablemente habrían sido forzados a trabajar hasta la muerte en Bergen-Belsen, o enviados a otros campos o a las minas de sal. En cambio, con documentos latinoamericanos, fueron trasladados a un pequeño recinto en un campo lleno de judíos, luego sacados de Bergen-Belsen en tren junto con 2.400 personas y rescatados por las tropas estadounidenses en abril de 1945. « InaPolak tardó 35 años en descubrir un papel polvoriento que probablemente salvó su vida y la de su familia en el campo de concentración de Bergen-Belsen. Fue recién en 1980, cuando limpiaba el apartamento de su madre que acababa de fallecer en la ciudad de Nueva York, que descubrió el documento con los nombres de ella, su hermana y sus padres. Era un certificado de ciudadanía salvadoreño. “Lo primero que pensé fue: '¡Ahora entiendo!'”, afirmó Polak, de 87 años. Ella y su familia eran judíos holandeses, sin ninguna conexión con el distante país centroamericano de El Salvador. Sin embargo, el certificado, de 1944, fue su salvación gracias a dos hombres llamados Mantello y Castellanos. Nunca los conocieron.»

4. Certificado de Nacionalidad proporcionado por el Coronel Castellanos y extendido por Mantello, nombrado por Castellanos Primer Secretario del Consulado General. Ambos arriesgaban su vida de ser descubiertos. Ambos actuaron sin remuneración, tan solo por su sensibilidad humana al sufrimiento de millones de personas bajo el régimen Nazi. El Coronel Castellanos nunca comento sus actividades heroicas y murió en 1977 en El Salvador.

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