Una crisis parcial es un ataque epiléptico que afecta a una parte del cerebro cuando las neuronas de un foco comienzan a dispararse de forma sincrónica, generando picos en el electroencefalograma, sin afectar la conciencia total. Existen dos categorías principales de crisis parciales: las simples, que producen síntomas sensoriales o motores localizados; y las complejas, que suelen limitarse a los lóbulos temporales.