El documento presenta dos pasajes bíblicos que describen la importancia de predicar el evangelio y bautizarse. Marcos 16 insta a los seguidores de Jesús a viajar por el mundo para compartir el evangelio y dice que aquellos que creen y son bautizados serán salvos. Hechos 8 narra cómo Felipe bautizó a un eunuco etíope después de que este confesara su fe en Jesucristo como Hijo de Dios.