Este poema compara el amor de una madre con la inmensidad del mar, el calor del sol y el canto de las aves. Agradece a su madre por cuidarlo cuando está enfermo, consolarlo cuando está triste, arrullarlo cuando llora y enseñarle lo correcto acercándolo a Dios. Concluye expresando su amor por su madre y que al igual que el amor de Dios, su amor de madre no tiene fin.