El documento presenta varios efectos ópticos ilusorios y experimentos sobre la percepción visual. Explica que nuestro cerebro es capaz de reconocer palabras aunque las letras estén desordenadas y que los niños pequeños no pueden distinguir entre parejas de delfines. Finalmente, propone un ejercicio de visión que causa la ilusión de ver a alguien parpadeando.