Un joven albañil sufre un accidente el día antes de su boda en el que se le cae un ladrillo en el miembro viril, rompiéndole parcialmente el ligamento cruzado interior escrotal. A pesar del dolor y de tener que esguazarlo, decide no contarle nada a su novia y seguir adelante con la boda. En la noche de bodas, cuando su esposa intenta seducirlo, él se baja los pantalones para mostrarle su miembro escayolado.