La evaluación trata sobre la actitud de Amparito hacia sus clientes. Amparito mostró una actitud deshonesta y aprovechada al manipular un recibo para engañar a una clienta sobre la calidad de los materiales. La actitud de Carolina, por otro lado, fue la correcta al sentirse engañada y reprochar a Amparito por proveerle un producto de mala calidad y un recibo alterado.