La compañía minera canadiense Dorato Resources opera actualmente en la Cordillera del Cóndor en Perú, una región fronteriza con Ecuador. Las comunidades indígenas Awajún-Wampis se oponen a las actividades mineras de Dorato en su territorio y exigen la anulación de las concesiones, alegando que nunca fueron consultados y que las operaciones están afectando sus recursos. Las autoridades peruanas han suspendido indefinidamente las actividades de Dorato debido a que no acreditan la propiedad de los terrenos.