El documento describe las virtudes de saber callar en diferentes situaciones como la humildad, la caridad, el heroísmo y la prudencia, y también los defectos de no callar como la cobardía, la flaqueza y la omisión. Además, señala que cuando buscamos a Dios en la oscuridad de la noche y no lo encontramos, es porque no lo buscamos en nuestros corazones, y concluye deseando un lindo día, una noche de paz y la certeza de la presencia de Dios en el corazón.