El documento compara la vida a un viaje en un convoy, donde se embarca al nacer y se desembarca al morir. A lo largo del viaje, se encuentra con personas que se suben y bajan en diferentes estaciones, incluyendo a los padres, hermanos, amigos e hijos. El viaje no es el mismo para todos y aunque a veces nos separemos de seres queridos, nuestro objetivo debe ser relacionarnos bien con los demás pasajeros y hacer nuestro viaje de la mejor manera posible hasta llegar a la estación final.