Renato ayuda a una señora cuyo auto se había averiado en la carretera en medio de la noche y la lluvia. Ella queda agradecida por su ayuda desinteresada. Más tarde, la señora ve a una camarera embarazada siendo amable con un cliente a pesar de sus propias dificultades y recuerda la bondad de Renato, dejándole una generosa propina con un mensaje para continuar el círculo de amor y ayuda hacia los demás.