Los Juegos Olímpicos de Barcelona en 1992 marcaron el inicio de una era dorada para el deporte en España que aún continúa tres décadas después, con deportistas españoles destacándose en una gran variedad de disciplinas en los Juegos Olímpicos desde entonces, incluyendo figuras como Rafael Nadal y Miguel Induráin que lograron gloria olímpica y se convirtieron en leyendas del deporte a través de sus exitosas carreras.