El documento contrasta las cosas fáciles y difíciles en las relaciones interpersonales. Señala que es fácil juzgar a otros o herirlos, pero más difícil reconocer los propios errores o curar las heridas causadas. También es más sencillo decir que se ama a alguien que demostrarlo con acciones diarias o perdonar a otros que pedir perdón uno mismo.