Los tratamientos farmacológicos para el Alzheimer incluyen cuatro medicamentos disponibles: donetepilo, rivastigmina y parche de Exelon, que inhiben la acetilcolinesterasa, y memantina, un antagonista de los receptores NMDA; estos fármacos tienen efectos similares pero también alteraciones gastrointestinales, anorexia y trastornos del ritmo cardiaco como efectos secundarios.