La Cumbre de la Alianza de Civilizaciones se celebró para promover el entendimiento y la cooperación entre naciones y pueblos de diferentes culturas y religiones, y para contrarrestar los estereotipos que fomentan la polarización y el conflicto entre el mundo islámico y occidental. Los líderes políticos y religiosos que asistieron discutieron formas de fortalecer el diálogo intercultural y combatir la intolerancia.