La aplicación Instagram se creó para abordar tres problemas: 1) las fotos de los teléfonos móviles no se veían bien, 2) el tiempo de carga era demorado, y 3) no existía una aplicación donde compartir fotos. Instagram resolvió esto permitiendo editar fotos con filtros y compartirlas fácilmente con otros usuarios y redes sociales. La aplicación ganó rápidamente popularidad, atrayendo 20,000 usuarios en los primeros días con una foto subida cada 2 segundos.