La producción de soja en Brasil alcanzó un nuevo récord en la temporada 2010/2011, superando los 70 millones de toneladas por primera vez. El estado de Mato Grosso fue el mayor productor con más de 23 millones de toneladas, seguido por Rio Grande do Sul y Paraná. El aumento de la producción se debió principalmente al cultivo de variedades más productivas y al avance de la frontera agrícola hacia nuevas tierras.