La fabricación y uso de computadoras tiene efectos negativos en el medio ambiente debido al consumo de recursos y generación de desechos durante su producción, y al consumo adicional de energía eléctrica requerida para su funcionamiento; la mayor parte de la energía y recursos se usan en la fabricación de los componentes electrónicos más que en su operación, usando procesos que requieren grandes cantidades de energía y materiales tóxicos.