El punk surgió a finales de los años 60 en Gran Bretaña y Estados Unidos como una burla al convencionalismo, con melodías, duraciones y tempos simples y rápidos, guitarras amplificadas, y letras que se burlaban de la rigidez del sistema y promovían la rebeldía y actitud independiente. Algunos de sus principales representantes fueron Ramones, Sex Pistols, Iggy Pop y The Who.