Un cero se siente solo y quiere unirse a un grupo de ochos que juegan en la plaza, pero siente que no encaja. Decide dividir su barriga para parecerse a un ocho y es aceptado en el grupo. Sin embargo, el cinturón que usó para dividirse pronto explota, revelando que sigue siendo un cero. A pesar de esto, los ochos lo aceptan de todos modos y prometen ser amigos sin importar las diferencias.