Este cuento infantil narra la historia de un árbol de avellano que se siente triste al perder sus hojas en otoño. Siguiendo el consejo del viento, el avellano emprende un viaje para llegar a la primavera, pasando por el verano y el invierno. En su camino se encuentra con el sol y un copo de nieve, quienes se unen a su viaje luego de demostrar que también saben cantar. Juntos logran abrir la puerta a la primavera cantando una canción.

1. Las Estaciones
Musicales

2. Las Estaciones Musicales por:
Díaz Aris Leydy, Nepomuceno Rosanna y Biel Brillinate
Escrito el 17 de marzo del 2022
Cuento Infantil
Edad: 3 a 7 años

3. Al llegar el otoño los árboles empiezan a cambiar, sus hojas cambian de color
de verde a amarillentas y empiezan a caer de los árboles.
Un día de esta época un árbol de Avellano empieza a llorar “Uuuuu”, — y
pregunta: —¿Por qué me estoy quedando sin hojas?, ¿Por qué el viento sopla
tan fuerte?, entonces el amigo viento que va pasando en ese momento — le
responde: — Estás en otoño amigo, en esta época suceden estas cosas, ¿No te
gustaria conocer mi amiga la primavera?

5. Pero para esto deberás pasar por el bosque del verano y atravesar las
colinas del invierno, recuerda que para salir del invierno debes encontrar
una puerta que solo abre si cantas una canción de primavera. ¿Sabes
cantar?
— ¡Claro que sé cantar! escucha mi voz: “Vivo en otoño, las hojas caen, el
viento sopla y quiero escapar, mi color empieza a cambiar y la primavera
quiero alcanzar”.

7. Así que, el Avellano siguió la idea del viento y emprendió un largo camino hacia
el bosque del verano, al llegar allí vio que el clima estaba muy caluroso, camino
hacia una colina y se encontró con el señor sol, –este le preguntó –¿Qué hace
por aquí el árbol de otoño? Él le comentó que iba hacia la primavera porque no
se sentía bien al ver sus hojas caer, el sol —le respondió: — vas por el camino
correcto amigo, pero ¿Podría yo acompañarte ya que en esta época no me siento
muy bien?, pues ofrezco más rayos de luz y me siento cansado.
Dice el otoño: — ¡Claro puedes venir, pero solo si sabes cantar! —Por su puesto
que se cantar, escucha mi voz — dijo: el sol.

9. Entonces el sol — cantó — : “vivo en verano donde hace mucho sol, la tierra se seca y hace mucho calor”.
El Avellano — le dice —: Puedes acompañarme amigo, vamos rumbo al invierno. Así ambos amigos se fueron y
caminaron y caminaron hasta que llegaron a la época del invierno.

10. Al llegar allí se encuentran con un copo de nieve que — les pregunta: —¿Qué hace
un árbol de otoño y el señor sol por estos lugares tan lejanos y fríos?, y el Avellano
— responde —: vamos rumbo a la primavera, mientras que el señor sol —le
pregunta—, ¿Sabes cómo llegar?
El copo de nieve — les dice: — claro puedo acompañarlos, deben cruzar una puerta
para poder entrar a la primavera, pero yo nunca he podido pasar porque no me se
una canción de esa época. Pone cara triste — y pregunta: ¿Saben ustedes alguna
canción de primavera?
El Avellano responde: — ¡Claro! llevanos hasta allí y cantemos juntos.

12. Los tres amigos, el Avellano, el señor Sol y el Copo de nieve se dirigieron
hasta la puerta de primavera y cantaron una hermosa canción: — “Es la
primavera, es la más hermosa… colores alegres y ricos aromas, los árboles
tienen muchísimas hojas, dan frutos nuevos, renuevan la historia, el señor sol
descansa mejor, sus rayos no tienen tanto esplendor. Es la primavera, es la
más hermosa…. colores alegres y ricos aromas”.

15. Y cuando finalizaron la canción, la puerta se abrió y todos pudieron cumplir su misión.