El autor describe cómo a lo largo de su vida creyó haber "matado" a su madre en diferentes ocasiones al independizarse, pero siempre la reencontraba cumpliendo un rol importante. Finalmente, la madre decidió morir sin aviso, dejando la lección de que a pesar de los intentos de independencia, las madres permanecen para siempre en la vida de sus hijos y es su decisión cuánto dura esa eternidad. El autor concluye instando a amar a las madres mientras estén presentes.