La maqueta representa Venecia de forma abstracta usando el color azul para los canales, una parte de la fachada de la Basílica de San Marcos, y los puentes que conectan las 118 islas, incluyendo el Puente de la Libertad, uno de los más representativos. Se construyó la maqueta con cartón paja, pintura, silicona y aerosol para capturar los elementos más distintivos de Venecia en una forma simplificada.