Cepillar regularmente el pelaje del perro ayuda a reducir la pérdida de pelo y mantenerlo más limpio, lo que disminuye la necesidad de bañarlo con frecuencia. Cuidar el pelo desde cachorro con cepillados diarios permite identificar problemas de salud tempranamente y estrechar el vínculo con la mascota. Es importante prestar atención al pelo de todas las zonas del cuerpo, incluyendo las patas.