La minería ilegal en Perú se caracteriza por la extracción de minerales como el oro sin control ni regulación ambiental del Estado. Se desarrolla principalmente en regiones remotas con poca presencia estatal, lo que dificulta la fiscalización. Está organizada en diferentes niveles, desde minería a pequeña escala hasta operaciones más grandes. Los involucrados actúan intencionalmente al margen de la ley para evadir el control del Estado.