Arquitectos del Movimiento Moderno (Historia de la Arquitectura)
Moda actual: 10 estilos para inspirarte
1. M o d a f o r b o y s a n d g i r l s . b l o g s p o t . c o m
2015
MODA EN LA
ACTUALIDAD
PEYTON
NUESTRO ESPACIO DE MODA
2. INTRODUCCIÓN
(Fuente: Wikipedia)
La moda, por llamarla así es un término bastante inconcreto. Esta palabra es una manera de
expresarnos libremente y socialmente. Siempre es asociada a la ropa, pero no por esta
razón tiene que ser así, la moda es una forma de expresar lo que y como somos.
Otra de sus definiciones sería: Seguir la que se estila, o adoptar los usos y costumbres del
país o pueblo donde se reside. Y también: Uso, modo o costumbre que está en boga durante
algún tiempo, o en determinado país, con especialidad en los trajes, telas y adornos,
principalmente los recién introducidos.
La moda puede expresar incluso nuestras emociones, si somos personas alegres, se
intentarían combinar el máximo de colores posibles (siempre y cuando combinen), si somos
personas frías, los colores más apropiados son los apagados(aunque siempre se lleven
colores azules turquesas, o verdosos).
Para las entrevistas de trabajo, presentaciones, o simplemente el día a día, usamos ropa de
distintos tipos: formal o informal. (Dentro de estas dos hay variantes que se explicarán
después.) La formal siempre se define como: trajes, vestidos, camisas, americanas,… Pero
no siempre esta clase de ropa sea elegante por el simple hecho de que parezcan
presentables. Hay muchas clases de ropa y no tiene por qué derivar sólo en eso. La ropa
informal, de esta hay muchas clases, siempre es un simple chándal o unas simples zapatillas,
y no tiene por qué.
En las primeras impresiones que nos da la ropa de alguien es la que se nos quedará, como la
que es esa persona. Yo si veo a alguien con ropa rota, zapatillas muy gastadas y todo
manchado deduzco que esa persona no está pasando por un buen momento económico. Por el
contrario, si veo a alguien con la ropa brillante, aseada y con los zapatos recién estrenados
deduciría que se trata de alguien que a bien en su situación financiera.
La moda ha ido evolucionando a medida que nosotros también, por las imágenes que se
observan de la Antigüedad, se comprueba que todo ha cambiado mucho en cuanto a lo
referido anteriormente. Antiguamente con un trozo de piel animal les bastaba, y
actualmente, esa piel cuesta un riñón, mientras que antes tenías que salir a cazar para
cubrir tu cuerpo. Lo que hacemos nosotros, sin embargo es dar la vuelta a la manzana y lo
que nos gusta se compra.
3. “SHOPPING”
(Fuente: Wikipedia)
La técnica del “shopping” es, realmente, una simple excusa de decir, no sé qué ponerme hoy,
me compraré algo, y esto no es así. Hay que reflexionar; si algo no lo queremos, o no nos
vale, ¿por qué no donarlo? ¿Porque guardarlo si no nos sirve?
Un minorista o tienda es un negocio que presenta una selección de bienes o servicios y se
ofrece a vender a los clientes por dinero u otros bienes. Ir de compras es una actividad en
la que un cliente navega por los bienes o servicios disponibles presentados por uno o más
detallistas con la intención de comprar una selección adecuada de ellos. En algunos
contextos puede ser considerada como una actividad de ocio, así como de carácter
económico.
En los tiempos modernos la orientación al cliente es más transferida hacia las compras en
línea, la gente de todo el mundo piden productos de diferentes regiones y los minoristas en
línea entrega allí los productos que allí casas, oficinas o donde quieran.
Siempre oímos hablar de nuevas tiendas porque los contactos en la actualidad permiten,
que, al instante sepamos dónde hay buena ropa, precios, calidad, etc... No solemos ir a una
tienda nueva sin acompañantes o solos, si alguien nos ha dicho que vayamos.
ESTILOS
(Fuente: nosotras.com)
Army chic. La tendencia estrella de este año no tiene ningún secreto: army significa
‘ejército’, con lo que remete al estilo militar que tanto está arrasando esta temporada. Y
chic sólo nos recuerda que tampoco es necesario vestirnos 100% para ir a la guerra,
escogiendo prendas poco femeninas o vistiéndonos enteras de uniforme. Lo mejor es
apostar por bolsos, pantalones o chaquetas que sí tengan influencias de guerra (como el
estampado de camuflaje o los colores verdosos), pero sin olvidar que vamos a pasear por la
calle, no a escudarnos en las trincheras.
Boho chic. Con influencias bohemias, este estilo apuesta por prendas desenfadadas y
divertidas (aunque sin abandonarnos tampoco al look 100% hippie). ¿Y cómo lo
4. reconocemos? Prendas clave son las faldas (largas) holgadas, armillas o chalecos con pelo,
túnicas bordadas, botas cowboy, cárdigans anchos o los bolsos tipo boho. Abundan los
colores y normalmente se renuncia al negro. Sus máximas representantes son Sienna Miller
o Kate Moss.
Boyfriend. Katie Holmes nos sorprendía a todos cuando se puso esos jeans anchos que
parecían pertenecer más al armario de Tom que al suyo. Pero lo que realmente hacía era
interpretar 100% el look boyfriend, es decir, ‘novio’. Este estilo tan simple se basa en
apostar por prendas generalmente anchas (jeans aunque también camisas, cárdigans o hasta
abrigos) con toques masculinos y que parezcan ser de nuestra pareja.
Casual. O antónimo de formal. Surgido casi como un movimiento alternativo al traje y la
corbata, este estilo reivindica la comodidad y la practicidad. ¿Sus estandartes? Los
tejanos, las camisetas (de manga corta sobre todo) y los jerséis sencillos. Básicamente,
cualquier pieza sin muchos adornos y que nos permita realizar cualquier movimiento con
facilidad. ¿Su máximo icono? El creador de Facebook, Marck Zukerberg.
Grunge. Nacido de la mano del estilo de música grunge, podemos crear un look con 4
prendas básicas: una camiseta a cuadros, pitillos o leggings, un sombrero oscuro y una chupa
de cuero. Abunda el negro y los colores neutros y, además, en chicas también encontramos
diademas, medias bordadas y vestidos holgados (y hasta con ciertos aire hippies). Para que
reconozcas el estilo, te brindamos su máximo estandarte, Peaches Geldof.
Lady. El estilo lady sólo responde a un valor: la ultrafeminidad. Cinturas y muslos marcados,
colores suaves, faldas, collares joya, cuellos bebé… Como polo opuesto al estilo grunge, las
chicas lady buscan realzar a la vez su lado más ingenuo y sensual, explotando al máximo su
feminidad. Si queréis conseguir el look, inspiraos en Scarlett Johansson.
Minimal. Para quienes huyan de complementarse como árboles de navidad. Este look (y
últimamente tomado casi como un estilo de vida) aclama a la sobriedad y a una máxima
clásica en el mundo de la moda: ‘menos es más’. De este modo las prendas, cuanto más
simples, mejor. Adiós a los bordados, ribetes, lazos, cenefas o estampados. El minimal
busca formas básicas y piezas monocolor.
Preppy. Si antes veíamos lo que era el minimal, la mejor manera de comprender el preppy es
imaginarnos todo lo contrario. Llevado a la gloria de la mano de Gossip Girl, este estilo es
una oda los estampados british, las pajaritas, diademas y lazos, las medias, las faldas
cortas, los bolsos de mano y las americanas tipo uniforme. ¿Lo más atrevido? Sus
imposibles (y tremendamente estudiadas) combinaciones de colores.
Punk. Tachuelas, cuero, crucifijos, medias rotas, botas y sobre todo negro, mucho negro.
Quizás el estilo más fácilmente reconocible, se caracteriza por abandonar los clichés
masculinos y femeninos y por rendir culto a la oscuridad del inframundo. Es habitual
también que se combine con maquillaje oscuro. ¿Su cara más popular? Taylor Momsen.
5. Trendy. Siempre a la última, así son sus adeptos. Generalmente más fans del estilo
underground (mercadillos callejeros, etc.) y los artículos vintage (heredados, propios del
siglo pasado) que de la moda mainstream (lo que llevan las masas). ¿Lo mejor? Son el
estandarte del eclecticismo, ya que adaptan las nuevas tendencias a su personalidad y
estilo de vida.
Nuestro consejo: Siempre que veáis la palabra chic en el nombre de un estilo, no significa
que tengáis que adornaros con accesorios caros o extravagantes. Simplemente nos
recuerda que debemos saber llevar esa tendencia hacia nuestro campo (y no al revés),
apostando por piezas que no renuncien a la elegancia ni al buen gusto. Podremos escoger
siempre el look que queramos mientras no nos desfasemos y sepamos llevarlo con gracia.