El Gobernador de Quilmes decidió no renovar el contrato con la empresa Covelia, históricamente asociada a Hugo Moyano y liderada por su hijo Pablo, para la recolección de residuos. Esto implicaría el despido de 500 trabajadores, por lo que Pablo Moyano amenazó con un paro nacional de camioneros, pero Boudou y Randazzo consideraron un "absurdo" e "despropósito" que un conflicto municipal tenga como respuesta una huelga a nivel nacional.