El documento relata varias historias de personas que sobrevivieron a los ataques del 11 de septiembre debido a pequeños retrasos e incidentes. Algunos llegaron tarde al trabajo por llevar a sus hijos al kinder, otros se demoraron por accidentes de tránsito. El mensaje principal es que Dios controla los detalles pequeños y quiso que estas personas estuvieran en otros lugares en ese momento. No hay que enojarse por retrasos u obstáculos, sino recordar que Dios nos cuida.