Dos pilotos ciegos de la ONCE abordan un avión de Iberia para despegar. Algunos pasajeros se ríen nerviosamente por la situación inusual, mientras que otros se muestran preocupados de que el avión no logre despegar y termine estrellándose en un lago cercano a la pista. Sin embargo, el avión despega sin problemas y los pasajeros se calman, aunque el piloto bromea con que algún día podrían gritar tan tarde que causarían un accidente.