Tres amigas - una castaña, una bellota y una avellana - querían cruzar un río. La castaña llevó a la bellota a la otra orilla, pero al volver a por la avellana se quemó con las brasas de carbón y asustó a la avellana, haciendo que estallara. La castaña llegó chamuscada y la avellana apagada a la orilla, enfadando a la bellota. Más tarde, sintieron pena por la avellana y la llevaron con un sastre, aunque sólo pudo coser