La mayoría de los recicladores empiezan a trabajar a una edad muy temprana, generalmente entre los 12 y 14 años, debido a la necesidad o a otras obligaciones. Aunque piensan que podrán cumplir sus sueños en el futuro, su educación se ve interrumpida y no logran terminar sus estudios primarios. Algunos días ganan bien, pero otros no ganan nada. Sin embargo, dicen que comparten entre ellos y que su vida no es tan mala a pesar de las desventajas de su oficio.