Tiko no puede dormir debido a los tamales que comió. Intenta varias técnicas para conciliar el sueño como tomar leche, darse un golpe, contar ovejas, pero nada funciona. Finalmente logra dormirse después de contar miles de ovejas, incluyendo una embarazada de gemelos. A la mañana siguiente Lego lo despierta temprano a pesar de que Tiko está muy cansado.