1. Tipos de afeitada Para el afeitado existen múltiples tipos de cuchillas, pero no todas son válidas para cualquier rostro. En esta presentación se mostraran los instrumentos con los cuales puedes afeitarte, según tu tipo de piel, habilidad y tus necesidades.
2. Navaja tradicional . Muy pocos hombres se atreven con este sistema porque hay que tener un pulso excepcional. Además, es muy importante mantener la hoja muy bien afilada (¿alguien sabe dónde hay afiladores hoy día?) y perfectamente limpia. Sólo algunos barberos o en algunos centros de cosmética masculina súper exclusivos se siguen utilizando pero, en general, es un instrumento cada vez más en desuso entre particulares.
3. Cuchillas . Éste es el sistema preferido por un mayor número de hombres hoy día. Ofrece un apurado perfecto y resultan especialmente útiles incluso a aquellos que no tienen una barba muy poblada. Y es que, por increíble que parezca, son estas últimas las más difíciles de afeitar. Las cuchillas requieren el uso de algún gel, crema o lubricante para ablandar el pelo y no producir cortes en la piel. Las cuchillas pueden ser desechables o no desechables. En realidad, la diferencia entre una y otra está en el mango. Las primeras se utilizan una vez y se tiran tal cual, con el mango y todo. Las no desechables no significa que haya que usarlas toda la vida, sino que cuando se gasta la cuchilla la sustituimos por otra cambiando el cabezal, pero manteniendo el mango.
4. Maquinillas eléctricas . Son las más nuevas del mercado y las que están más de moda por su comodidad. No suelen requerir el uso de geles o cremas, se utilizan directamente sobre la barba y cortan el pelo sin producir heriditas en la piel. Algunas incluso las pueden usar bajo la ducha. Son ideales cuando se tiene una barba relativamente larga, una a la que casi todos los tipos de cuchillas no podrían acceder; también funciona muy bien con las barbas muy pobladas. Eso sí, el apurado no es tan perfecto como el de la cuchilla dado que el corte es más superficial.