Salomón, un pequeño tigre que llegó a la aldea, defendió a las hienas ladronas de la aldea. Maximiliano lo retó a un duelo para demostrar que él era el más fuerte, pero Salomón cortó una hoja de papel con su espada para mostrar su habilidad. Salomón le enseñó a Maximiliano que no deben compararse con los demás ni creerse mejores, sino utilizar sus habilidades para ayudar a los demás. Maximiliano pidió disculpas por su comportamiento.