El documento invita a las personas a hacer un inventario de los dones recibidos de Dios en el cuerpo y la vida para vivir con más alegría y optimismo, en lugar de enfocarse en los problemas. Destaca las maravillas del cuerpo humano como el corazón, los pulmones, los ojos, los oídos y la sangre, y concluye que las personas valen mucho.