Diana estaba embarazada y su hijo Luisito de 3 años cantaba y se encariñaba con su hermanita en el vientre. Al nacer, la bebé tuvo complicaciones y estaba grave en cuidados intensivos. A pesar de las prohibiciones, Luisito insistió en verla y cantarle, lo que pareció mejorar su estado hasta el punto que se recuperó milagrosamente.