La vida humana comienza en la fecundación cuando el óvulo es fertilizado por el espermatozoide, formando un cigoto con un código genético único. A partir de ese momento, el embrión se desarrolla de manera continua y gradual hasta el nacimiento siguiendo un programa preestablecido. La ciencia muestra que el embrión es un ser humano autónomo desde la concepción. La Iglesia Católica defiende que la vida es un don de Dios y debe protegerse desde el momento de la concepción.
La vida humana comienza en la fecundación cuando el óvulo es fertilizado por el espermatozoide, formando un cigoto con un código genético único. A partir de ese momento, el embrión se desarrolla de manera continua y gradual hasta el nacimiento siguiendo un programa preestablecido. La ciencia muestra que el embrión es un ser humano autónomo desde la concepción. La Iglesia Católica defiende que la vida es un don de Dios y debe protegerse desde el momento de la concepción.