El poema aconseja vivir una vida simple y sin ambiciones, manteniendo la inocencia de un niño. Volando bajo se encuentra la verdad y la felicidad, no en la ambición desmedida por el éxito y las posesiones materiales. Diógenes creía que la verdadera riqueza es necesitar poco, y que el conquistador termina esclavizándose a lo que conquistó. El poema insta al hombre a recuperar la inocencia de un niño para comprender estas lecciones.