El documento habla sobre los esfuerzos del Programa para la Vida Sagrada y el Desarme para promover cambios a nivel individual y colectivo orientados hacia el desarme, la reconciliación, el respeto por la vida y la solución pacífica de conflictos. Busca construir una sociedad civil desarmada no solo de armas sino también de la intención de hacer daño, y enseñar principios sagrados que reconocen la dignidad humana y valoran el diálogo para resolver diferencias.