El documento habla sobre cómo a medida que las mujeres envejecen tienden a ganar peso debido a la acumulación de información en su cabeza. Eventualmente la información ya no cabe en la cabeza y comienza a distribuirse por todo el cuerpo. Por lo tanto, las mujeres no están gordas, sino que están cultas debido a toda la información que han acumulado a lo largo de los años.