El documento describe los paisajes naturales de la Argentina seca, en particular la puna, que consiste en bloques cristalinos elevados a gran altura en la cordillera de los Andes que son fríos, secos y desiertos. También menciona estrechas quebradas como Humahuaca y el Toro, y cómo hacia el occidente el ambiente se vuelve más hostil, conocido como la Puna Bravía. Además, distingue entre la Puna Seca, la Puna de Transición y la Puna Salada.