3. BIOGRAFÍA
• Gabriela Mistral fue una destacada poetisa, diplomática y
pedagoga chilena, nació el 7 de abril de 1889. Su verdadero
nombre fue Lucila Godoy Alcayaga.
• Su infancia transcurrió en
el Valle de Elqui, Montegrande.
• Desde muy joven quiso ser
educadora y más tarde,
consiguió el titulo de
magisterio en Los Ángeles.
4. • En 1914, obtuvo varios premios por su obra
los "Sonetos de la Muerte", haciéndose
conocida a nivel nacional.
• En 1922, publica "Desolación" y edita "Lecturas
para Mujeres".
• En 1923, consiguió el título
de profesora de Castellano.
• Posteriormente, en 1932,
es nombrada Cónsul en
Génova y después, en
Madrid, cargo que ejerce
hasta 1935.
5. • Alcanza renombre al recibir el Premio Novel de
Literatura, en 1945 y seis años después el
Premio Nacional de Literatura.
• En una actitud casi
inexplicable de parte de
los encargados, sólo
se le entregó el Premio
Nacional de Literatura
en 1951.
• En 1957 fallece en Long
Island, Nueva York. Sus
restos fueron sepultados
en Montegrande, tierra que
la vio nacer.
6. TRAYECTORIA LITERARIA
La poesía de Gabriela está inspirada en el amor materno, en la pasión
frustrada, en el mundo de los niños y en la presencia cultural de su
continente.
Algunas de sus obras son las siguientes:
• Sonetos de la Muerte (1914)
• Desolación (1922)
• Lecturas para mujeres (1923)
• Ternura (1924)
• Tala (1938)
• Todas íbamos a ser reinas (1938)
• Lagar (1954)
• Recados, contando a Chile (1957)
• Poema de Chile (1967, edición póstuma)
• Niña errante (2009, epistolario con Doris Dana)
• Almácigo (2008, edición póstuma de poemas inéditos)
7. OBRAS MÁS IMPORTANTES
Y entre las obras nombradas anteriormente, las
mas importantes son las siguientes:
• 1914 Sonetos de la muerte.
• 1922 Desolación.
• 1924 Ternura.
• 1938 Tala.
• 1954 Lagar.
8. POEMAS
Algunos de sus poemas son, por
ejemplo:
MIEDO
Yo no quiero que a mi niña
golondrina me la vuelvan;
se hunde volando en el Cielo
y no baja hasta mi estera;
en el alero hace el nido
y mis manos no la peinan.
Yo no quiero que a mi niña
golondrina me la vuelvan.
Yo no quiero que a mi niña
la vayan a hacer princesa.
Con zapatitos de oro
¿cómo juega en las praderas?
Y cuando llegue la noche
a mi lado no se acuesta...
Yo no quiero que a mi niña
la vayan a hacer princesa.
Y menos quiero que un día
me la vayan a hacer reina.
La subirían al trono
a donde mis pies no llegan.
Cuando viniese la noche
yo no podría mecerla...
¡Yo no quiero que a mi niña
me la vayan a hacer reina!
9. APEGADO A MÍ
Velloncito de mi carne,
que en mi entraña yo tejí,
velloncito friolento,
¡duérmete apegado a mí!
La perdiz duerme en el trébol
escuchándole latir:
no te turben mis alientos,
¡duérmete apegado a mí!
Hierbecita temblorosa
asombrada de vivir,
no te sueltes de mi pecho:
¡duérmete apegado a mí!
Yo que todo lo he perdido
ahora tiemblo de dormir.
No resbales de mi brazo:
¡duérmete apegado a mí!