Robert Fulton nació en Pensilvania y desarrolló un interés temprano en las máquinas de vapor. Más tarde, en Inglaterra, creó su primer invento, un sistema de elevadores para la navegación interna. En 1807, construyó el Clermont, el primer barco de vapor exitoso que navegó por el río Hudson entre Nueva York y Albany. El Clermont causó gran sorpresa y miedo entre los tripulantes de otros barcos, que veían al barco como un "monstruo" vomitando fuego y humo.
2. ROBERT FULTON.Robert Fulton nació en Pensilvania. Pudo
haberse interesado por primera vez en las
máquinas de vapor en 1777 cuando, a la
edad de 12 años, visitó al delegado de
Láncaster William Henry, que había
estudiado la máquina de vapor de Watt en
una visita a Inglaterra. A su vuelta, Henry
construyó su propia máquina y en 1763 (dos
años antes del nacimiento de Fulton) intentó
colocarla como motor de un barco, que
terminó hundiéndose.
3. ROBER FULTON.
Fulton presenta la primera máquina de vapor a Napoleón
Bonaparte en 1803.
Cuando alcanzó la mayoría de edad, en 1786, partió a
Inglaterra para estudiar pintura. En este país creó su
primer invento, que consistía en un sistema de
elevadores aplicado a la navegación interna.
4. PRIMER BARCO DE VAPOR.
El monstruo de Fulton, el Clermont o el Barco de Vapor
del Río Norte.
Aproximadamente entonces Fulton escribió a James
Watt, de la compañía Boulton and Watt, solicitando la
construcción de una máquina de vapor a partir de sus
planos, y en 1804 volvió a Inglaterra. En 1802, el
Charlotte Dundas de Symington había remolcado dos
barcazas de 70 toneladas por canal Forth y Clyde, en
Escocia, demostrando la utilidad de la potencia
desarrollada por la máquina de vapor. Aunque Fulton
probablemente nunca llegó a ver este barco,
aparentemente mantenía correspondencia con Henry
Bell, que sí que estaba tomándose un cierto interés en
ello.
5. PRIMER BARCO DE VAPOR.
Fulton patentó su diseño del barco de vapor el 11 de
febrero de 1809, construyó más barcos y diseñó el
primer barco de guerra impulsado a vapor, que se
llamaría Demologos. No llegaría a verlo
completado. Fue bautizado finalmente Fulton the
First, en su honor.
6. DIARIO.
La sorpresa y el miedo se excitaron entre los
tripulantes de estos barcos dado que la
apariencia del navío era extrema. Estas
personas simples, la mayoría de los cuales
nada había oído hablar de los experimentos de
Fulton, veían lo que les parecía un monstruo
inmenso, vomitando fuego y humo por su
garganta, golpeando el agua con sus aletas y
haciendo al río templar con su rugido. Algunos
se arrojaron al suelo de la cubierta de sus
navíos, mientras que otros tomaron sus botes y
huyeron a la costa, dejando a sus barcos
7. DIARIO.
La sorpresa y el miedo se excitaron entre los
tripulantes de estos barcos dado que la
apariencia del navío era extrema. Estas
personas simples, la mayoría de los cuales
nada había oído hablar de los experimentos de
Fulton, veían lo que les parecía un monstruo
inmenso, vomitando fuego y humo por su
garganta, golpeando el agua con sus aletas y
haciendo al río templar con su rugido. Algunos
se arrojaron al suelo de la cubierta de sus
navíos, mientras que otros tomaron sus botes y
huyeron a la costa, dejando a sus barcos