El Acueducto de Segovia es una impresionante estructura romana que transportaba agua desde el río Frío hasta la ciudad de Segovia. Construido en el siglo I d.C., el acueducto tiene una longitud de 25 km y alcanza una altura máxima de 28 metros, transportando agua a través de 178 arcos. Se trata de uno de los acueductos romanos mejor conservados del mundo.