TRIPLICO QUE TRATA SOBRE LA OCASIÓN CUANDO PEDRO Y JUAN SON ENCARCELADOS Y LUEGO, SON LLECARON AL CONCILIO. SE ENCUENTRA EN LOS HECHOS DE LOS APÓSTOLES 4:1-22 ADEMAS HAY UN CRUCIGRAMA BÍBLICO, UNA ANÉCDOTA CRISTIANA, ALGUNOS PENSAMIENTOS SABIOS Y UN VERSÍCULO POR MEMORIZAR
PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pdf
La Palabra en Acción
1. aquí en adelante a hombre alguno en este nombre.
18 Y llamándolos, les intimaron que en ninguna
manera hablasen ni enseñasen en el nombre de Jesús.
19 Mas Pedro y Juan respondieron diciéndoles:
Juzgad si es justo delante de Dios obedecer a vosotros antes que a Dios;
20 porque no podemos dejar de decir lo que hemos
visto y oído.
21 Ellos entonces les amenazaron y les soltaron, no
hallando ningún modo de castigarles, por causa del
pueblo; porque todos glorificaban a Dios por lo que
se había hecho,
22 ya que el hombre en quien se había hecho este
milagro de sanidad, tenía más de cuarenta años.
Podemos confiar en Él
No sé mucho sobre ser perseguida. Mi bienestar
físico nunca se vio amenazado por lo que creo ni
por lo que digo. Lo poco que «sé» sobre el tema
proviene de lo que escucho o leo. Pero no es así
para muchos hermanos en Cristo alrededor del
mundo. La vida de algunos peligra todos los días
porque aman a Jesús y desean que otros también lo
conozcan.
Hay otra forma de persecución que tal vez no sea
amenazante, pero que destroza el corazón: la que
surge de los miembros de la familia que no son creyentes. Cuando los seres queridos ridiculizan nuestra fe o se burlan de lo que creemos y de cómo demostramos nuestro amor a Dios, nos sentimos rechazados y despreciados.
Pablo les advierte a los creyentes que seguir a Cristo generará persecución: «… todos los que quieren
vivir piadosamente
en Cristo Jesús padecerán
persecución» (2 Timoteo
3:12), y sabemos
que el rechazo a
veces vendrá de
parte de aquellos a
quienes
amamos
(Mateo 10:34-36).
Pero cuando nuestros seres queridos rechazan el amor
de Dios, lo tomamos en forma personal.
Jesús nos dijo que oráramos por quienes nos persiguen.
Jesús dijo: Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los
que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os
persiguen. (Mateo 5:44), y esto incluye a otros aparte
de los desconocidos que nos odian. Dios puede darnos
gracia para perseverar en medio de la persecución, aun
cuando esta provenga de aquellos a quienes amamos.
Nuestro Pan diario. Edición Mayo. 2013.
AÑO V. NUM ERO HCH. 4 A.
H E C H O S DE L O S AP O S TO L E S
Escrito
Está En
Acción
Citas y Pensamientos Sabios
Lo mas importante y precioso, no es aquello que
tengo en mi vida, sino a Quien tengo.
………..
Donde hay fe hay amor,
donde hay amor hay paz,
donde hay paz está Dios,
donde está Dios no falta nada.
……………
La posición más segura para que los
cristianos avancen, es de rodillas.
………….
La gente puede burlarse de nuestro mensaje,
pero no puede detener nuestras oraciones.
………….
Lo que hace la diferencia entre los cristianos
victoriosos y dichosos,
y los derrotados y amargados, no son los problemas,
sino la actitud ante los problemas.
Para la Gloria de Dios y el bien
del ser humano
1.
2.
3.
4.
Editorial Cristiana “El Maestro Silencioso” Coordinador:
Dr. Luis A. Silva Cisneros. Tel. 0241 8233566.
Email: luissilvamd@hotmail.com
Portal en Internet: elmensajerosilencioso.blogspot.com
Radio en Internet: www.radiounaluzenelcamino.com
Contenido
Crucigrama (Hch. No. 4A). Lectura
en Hechos de los Apóstoles: 4:1-22.
Pedro y Juan ante el concilio.
Podemos confiar en Él
Citas y Pensamientos sabios.
Versículos para Memorizar.
Hechos de los Apóstoles 4:1-22.
Pedro y Juan ante el concilio
1 Hablando ellos al pueblo, vinieron sobre ellos los
sacerdotes con el jefe de la guardia del templo, y
los saduceos,
2 resentidos de que enseñasen al pueblo, y
anunciasen en Jesús la resurrección de entre los
muertos.
2. CRUCIGRAMA: (Hch. No. 4A). LECTURA EN HECHOS 4:1-22.
PEDRO Y JUAN EN EL CONCILIO.
VERTICALES. 1. ¿Qué hacía el pueblo con
Dios, por el milagro de sanidad efectuado en el
cojo de nacimiento? 2. ¿Quién era uno de los dos
apóstoles puestos presos en la cárcel por anunciar
la Palabra y la resurrección de Jesús? 3. ¿Qué era
Jesús, reprobada? 5. ¿Quién era uno de los sumos
sacerdotes que se reunieron para juzgar a Pedro y
Juan? 7. ¿Qué pasó con muchos que oyeron la
predicación de la palabra de Dios? 8. ¿En el
nombre de quién el cojo de nacimiento fue
sanado? 10. ¿Qué no hay en ningún otro nombre
fuera de Jesucristo? 11. ¿En dónde se reunió el
concilio? 12. ¿De dónde ordenaron salir a Juan,
Pedro y el cojo sanado?
HORIZONTALES. 4. ¿Qué no podían dejar de decir
Pedro y Juan ante el pueblo? 6. ¿Cómo estaban los
lideres de los judíos con los apóstoles por anunciar la
Palabra y la resurrección de Jesús? 9. ¿Quiénes eran
unos que estaban resentidos con Pedro y Juan? 13. ¿En
dónde pusieron presos a Pedro y Juan? 14. ¿Qué
hicieron contra los apóstoles para que no hablaran y
enseñaran más en el nombre de Jesús? 15. ¿Qué otra
cosa no podían dejar de decir Pedro y Juan ante el pueblo? 16. ¿Qué habían hecho Pedro y Juan con el cojo
de nacimiento? 17. ¿A quién glorificaba el pueblo?
18. ¿Quién era otro de los apóstoles puestos presos en la
cárcel?
3 Y les echaron mano, y los pusieron en la cárcel
hasta el día siguiente, porque era ya tarde.
4 Pero muchos de los que habían oído la palabra,
creyeron; y el número de los varones era como
cinco mil.
5 Aconteció al día siguiente, que se reunieron en
Jerusalén los gobernantes, los ancianos y los escribas,
6 y el sumo sacerdote Anás, y Caifás y Juan y Alejandro, y todos los que eran de la familia de los
sumos sacerdotes;
7 y poniéndoles en medio, les preguntaron: ¿Con
qué potestad, o en qué nombre, habéis hecho vosotros esto?
8 Entonces Pedro, lleno del Espíritu Santo, les dijo: Gobernantes del pueblo, y ancianos de Israel:
9 Puesto que hoy se nos interroga acerca del beneficio hecho a un hombre enfermo, de qué manera
éste haya sido sanado,
10 sea notorio a todos vosotros, y a todo el pueblo
de Israel, que en el nombre de Jesucristo de Nazaret, a quien vosotros crucificasteis y a quien Dios
resucitó de los muertos, por él este hombre está en
vuestra presencia sano.
11 Este Jesús es la piedra reprobada por vosotros
los edificadores, la cual ha venido a ser cabeza del
ángulo.
12 Y en ningún otro hay salvación; porque no hay
otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en
que podamos ser salvos.
13 Entonces viendo el denuedo de Pedro y de
Juan, y sabiendo que eran hombres sin letras y del
vulgo, se maravillaban; y les reconocían que habían estado con Jesús.
14 Y viendo al hombre que había sido sanado, que
estaba en pie con ellos, no podían decir nada en
contra.
15 Entonces les ordenaron que saliesen del concilio; y conferenciaban entre sí,
16 diciendo: ¿Qué haremos con estos hombres?
Porque de cierto, señal manifiesta ha sido hecha
por ellos, notoria a todos los que moran en Jerusalén, y no lo podemos negar.
17 Sin embargo, para que no se divulgue más entre
el pueblo, amenacémosles para que no hablen de