El fotógrafo Peter Menzel viajó por el mundo para fotografiar a 30 familias de 24 países diferentes y la comida que consumirían en una semana, anotando el gasto de cada familia. El libro resultante, Hungry Planet, muestra grandes diferencias entre los países en términos de tamaño de las familias, productos consumidos y gastos semanales, que variaron desde $500.07 para una familia en Alemania hasta solo $1.62 para una familia en Chad.